Hace poco elegí ser actor. Me costó decidirme. Ahora que lo hice no voy a jugar a medias tintas. En este blog publicaré todos los éxitos, fracasos, alegrías y tristezas de mi carrera. Bienvenidos a los entretelones de la vida de un actor. Pónganse cómodos. Espero que cuando caiga el telón aplaudan de pie.

domingo, 26 de septiembre de 2010

Otra vez al escenario


Este Sábado salí nuevamente al escenario. Luego de un no muy grato suceso ocurrido la última función en el Monstruo, se terminó bajando uno de los actores del elenco. Y ahí se me hizo el hueco. Rápidamente me puse a leer la letra del personaje que me toca representar, ya que no es el mismo que tuve que hacer funciones anteriores en donde me había tocado reemplazar a Huerquen, y a imaginar el mundo en el que se mueve este sujeto. Esta vez es diferente, ya que la confianza depositada en mi no sólo por Christian, el director, sino por todos y cada uno de mis compañeros de elenco, implica un compromiso mucho mas serio, ya que pasaría a formar parte fija (aún cuando sea momentáneo) del elenco.

Mas allá de la felicidad y el placer que me da hacerlo, tengo un sensación ambigua, ya que si bien es lo que siempre quise, formar parte de este grupo pero como actor, la circunstancia por la que llego a este lugar no es la que hubiera preferido. Mas allá de ésto, es una enorme oportunidad para mostrarme una vez más y ganar confianza. Una demostración más de que cuando uno pide el universo responde.

El Monstruo tan temido
Sábado - 21hs.
Teatro del Abasto
Humauaca 3549
Reservas: 4865-0014

martes, 14 de septiembre de 2010

Salvavidas Emergente

Estuve hablando con Morta, un amigo que conduce el programa llama Salvavidas Emergente en la radio on-line Bioma Radio. Me propuso hacerme una nota. Me interesó mucho la forma en que me lo planteó y la idea en general que tiene para hacer las cosas. Acá les dejó el mail con sus propias palabras para que vean de qué les hablo:


Negro, como andas?

Quiero que vengas a la radio, que te sientes y te quedes un buen rato en el programa. Que si te interesa participes y la pasemos relajado y hablando tranquilos. No me va la de hacerte una entrevista de 5 minutos a las corridas que pases el chivo y chau a otra cosa marisopa, para eso te saco al aire por teléfono. Me gustaría filosofar un rato, hablar de vos, del arte y de la vida en general. Motivar a la gente a seguir su camino interior y no tener miedo al cambio, q se yo, cosas que por ahí vos y yo estamos viviendo y esta bueno compartirlas. Por eso quiero tiempo y espacio.

Si estas ansioso, la libertad de venir la tenes cualquier martes, solo que para lograr un poco esa charla fluida que busco necesitamos relax y tiempo.

Fijate si te gusta y coordinamos.
Abrazo
Morta

viernes, 10 de septiembre de 2010

Los miércoles son sagrados


Otra vez miércoles. Salgo a las corridas del trabajo, almuerzo algo en casa y me voy a mi cuarto a diagramar la clase de ese día. Durante la semana recolecté varios ejercicios para sorprender a mis alumnos de la Fundación con algo nuevo. Debo destacar que los miércoles se han convertido en un día prácticamente sagrado para mí. Pero no sólo desde las 18 hs, sino que varias horas antes cuando diagramo los ejercicios. Hay algo que nace de mí y que me impulsa a continuar, a no bajar la guardia. Encontrar dentro de lo actoral esta nueva veta es muy estimulante. Cada ejercicio, cada clase que convivo con el grupo voy sintiendo nuevas inquietudes, enfrentando nuevos desafíos. Es enorme la alegría de ver como se van desenvolviendo a medida que van captando la idea del "juego" de lo "lúdico" para incorporar a su actuación. Además, tienen una gran capacidad para aggiornarse a las instrucciones que les voy dando de afuera. Si bien prácticamente ninguno de ellos estuvo relacionado con el teatro, demuestran ser muy inteligentes para pensar en el marco del escenario. Para mí, es una de las cuestiones más interesantes que hacen a un actor, ser "pensante" dentro del escenario. Parece una obviedad, pero creo que es un concepto básico y primordial que diferencia al actor por sobre sus pares. Como decía, si bien estos chicos estan dando sus primeros pasos, no dejan de sorprenderme cada vez que dejan volar su imaginación y se desenvuelven creativamente. Luego llega el final de la clase. Sus devoluciones son muy gratificantes. Me llenan de felicidad ya que siento que no solo crezco humanamente, lo cual es vital, sino también como actor y, porque no, como profesor.

jueves, 9 de septiembre de 2010

La omisión de la familia Coleman

Teatro: Timbre 4 - Av. Boedo 640
Domingo 21.15 horas


Hace varios largos fines de semanas que quería ver esta obra. Por alguna u otra razón siempre me había quedado con las ganas de ver a los Coleman. Tantas críticas, tantas recomendaciones, tantos años en cartelera que el entusiasmo por verla iba creciendo minuto a minuto apenas entre a esa confortable nueva sala de Timbre 4.

Dentro de una escenografía propia de una casa de familia de clase media en deterioro, comenzó la tan esperada obra. Ganchos directos al mentón desde los primeros segundos no me permitían despegarme de la silla. Velocidad y precisión en los diálogos y en los movimientos escénicos. Poco a poco esos entrañables personajes iban mostrando su juego, sus esencias y desarrollando esta tan particular historia. En esta obra escrita y dirigida por Claudio Tolcachir, todo parece funcionar mal. Todo parece quebrado y equívoco.

Los roles se confunden. ¿Quién es quién? La abuela parece madre y la madre hermana. Hermana menor. Hermana con serios problemas psicológicos, que quiere todo para ella. Pero por eso no deja de ser susceptible para dar y recibir sentimientos. El hijo con problemas mentales posee un léxico complejo que traduce lo que percibe en su entorno a un idioma que los demás no entienden y que intentan callar al grito de “llegó la hora de la pastilla”. El hermano casi no puede expresarse, sino a través de los golpes y parece que se relaciona más con el alcohol (y con lo ajeno) que con sus afectos. Su hermana melliza, víctima, gambetea su destino cosiendo para afuera y clausurando toda posibilidad de relacionarse con un hombre. Tal vez, una equivocada estrategia para no imitar a su madre. Falta la hermana mayor, que ha elegido escapar y formar una familia que mantiene oculta. En ese maremoto, la abuela es la única que da cariño, aunque a veces eso se traduzca en la imposición de cierto orden, que todos acatan y esperan.

Uno no se despega de la silla hasta el final, en donde, con crudeza y sarcasmo, finaliza la historia entre risas (o debería decir dejos de angustia, por la realidad que se ve y que se "abandona"). Salí con la sensación de haber visto algo bueno, muy bueno, que no hace mas que alimentar el hambre de poder llegar que permanece latente en mi.


martes, 7 de septiembre de 2010

Enseñando, aprendí – Actor y, también, profesor

Hace algunos meses, empecé a gestar una idea. Esa idea no termina de aclararse en mi cabeza, a pesar de que ya empieza a dar pequeños chispazos. Al principio dudaba de mi capacidad. Estaba consciente de la dificultad que podía significar poner en prática esa idea inicial y que necesitaba un espacio para llevarla a cabo. Esa idea, de la que estoy hablando, es la de dar clases de teatro.

Por eso me acerqué a mi tío Hernán, presidente de una Fundación/Comunidad Terapéutica vinculada con el manejo de adicciones, y le manifesté esa necesidad que echaba raíces en mi cabeza. Luego de recibir el visto bueno de él, arranqué con el taller.

En un principio no fue fácil encarar la situación de tener cuarenta y pico de personas en frente, muchos de los cuales no tenían idea de lo que significa una clase de teatro. Poco a poco, tanto ellos como yo, fuimos soltándonos, ganando confianza y, a partir de ahí, empezaron a darse una serie de situaciones muy intensas y llenas de alegría. Es gente que está en proceso de recuperación, que en muchos casos se encuentran afectivamente bloqueados, por lo que recibir el cariño de ellos y ver como clase a clase va creciendo y dando el mejor de los esfuerzos, me llena de alegría y orgullo. Es muy fuerte ver el empeño que le ponen y esas caras de felicidad al terminar cada clase. Los agradecimientos son constantes, lo cual me demuestra que voy por el buen camino y que realmente se sienten a gusto con la propuesta.

Todo esto no solo me sigue formando como actor, ya que pongo la cabeza cien por ciento del día en el armado y desarrollo de las clases, sino como persona, como ser humano, lo cual genera en mí una satisfacción y una sensación de deber cumplido muy intensa.

domingo, 29 de agosto de 2010

Saltá y la red aparecerá

No es fácil el camino. Mucho menos la vida del actor. Varias veces son más los sinsabores que las alegrías. Todos los días uno tiene que levantarse y confiar en que es capaz de alcanzar el objetivo. Ilusiones perdidas, piedras en el camino, disgustos, alegrías, felicidades, etc. son algunas de las cosas con las que me toca lidiar segundo a segundo. Pero lo importante es seguir adelante. Creer que todo es posible, que es cuestión de "SALTAR Y APARECERÁ LA RED" como alguna vez leí en un libro. Las cosas no son inalcanzables e imposibles per se, sino porque no las hacemos.

Preferimos estancarnos en el "esto no es para mi" y ahí está el error, porque si uno realmente busca lo que quiere y trabaja con plena fe, el universo responde. No es fácil el proceso, por supuesto... pero las cosas se disfrutan mas cuando uno pone todo para lograrlas, cuando se desgarra y entrega cuerpo, mente y alma por lo que cree y finalmente las obtiene. Es laburar día a día o "paso a paso" (diría Mostaza Merlo) en pos de mi sueño. Y eso es justamente lo que trato de hacer. Mi sueño no pasa por tener éxito o por ser reconocido como actor, sino simplemente ser yo mismo. Poder sincerarme, aceptar y disfrutar como soy, quien elegí ser. El éxito, reconocimiento o fama será (o no) una consecuencia de eso. Lo que realmente es exitoso es la libertad para ser quien, en escencia, soy.

jueves, 26 de agosto de 2010

"La ley es actuar" - Suplemento Si!

La ley es actuar
Es abogado pero se inclinó por el teatro. Hoy protagoniza cuatro cuentos cortos de Kafka.
Por: Pablo Raimondi


Asfixia. Marcos en un pasaje del cuento “El paseo repentino”.

En una casa museística de Palermo, Marcos de las Carreras (26) emerge entre viejos libros legales y algo de nostalgia. "En el 2000 estaba en la mitad de la carrera de Abogacía y buscaba mi veta artística. No me cabía la estructura del Derecho, por eso me metí en el teatro. Fue la terapia que me liberó", dice este fana de Soda Stereo y Andrés Calamaro (tiene un tattoo en un antebrazo que dice Honestidad brutal).

El protagoniza la obra teatral Kafka, negro de tan preciso, cada viernes a las 23 en el Espacio Cultural Pata de Ganso (Pasaje Zelaya 3122) en el Abasto. "Atravieso el opresivo ambiente de los cuentos El paseo repentino, Ante la ley, Buitres y Una confusión cotidiana. No emito palabra, es pura corporalidad", agrega.

El querer escapar y no poder salir genera, según el actor, un clima asfixiante y sórdido que conjuga con ruidos de vidrios rotos e imágenes surrealistas. "Mi parte preferida es cuando me desgarro la ropa, al final del primer cuento", confiesa Marcos, que también es asistente de dirección en la obra El Monstruo tan temido (sáb. a las 21) en el Teatro del Abasto.

-¿Cuánto tiempo podrías estar sin usar el celular?

-Me lo robaron tres veces. Estuve como dos semanas sin teléfono y me sentí más libre, vino bien.

-¿Cuál fue el mensaje de texto más insólito que recibiste?

-Uno bien cholulo de un amigo: "Estoy tomando una birra junto a Pamela David". ¡Me descolocó!

Fuente: Suplemento Si! del diario Clarín
Fecha: 20 de Agosto de 2010
Ver nota: http://www.si.clarin.com/2010/08/20/home/02207431.html

miércoles, 25 de agosto de 2010

Crítica Kafka... VIII

Les dejamos 2 críticas más que tuvimos en la obra "Kafka, negro de tan preciso"





"Cuando fui a ver Kafka, negro de tan preciso lo hice convocado por la figura del genial autor checo pero cuando llegué allí me encuentro con un espectáculo que no dejó de sorprenderme, para bien, desde el comienzo."

Marcelo Sartal
Ver critica completa

"La puesta de Stella es ambiciosa y con cuatro artistas cabalmente entrenados no sólo por el preciosismo de sus movimientos sino por la ductilidad con la que encaran la tarea exhibir sus dolores, mutaciones y búsquedas"

Teresa Gatto
Ver crítica completa

domingo, 22 de agosto de 2010

Crítica Kafka... VII

Kafka... es una pieza de teatro experimental que, mediante un mix interdisciplinario, nos introduce en el universo kafkiano a través de cuatro cuentos de la autoría del escritor austro-húngaro. Las narraciones son: El paseo repentino, Ante la ley, Buitres y Una confusión cotidiana, esta última en presentación audiovisual.

Con separadores de video, las unidades dramáticas parecen formar parte de una misma historia, ya que son atravesadas por seres oníricos similares que aluden a la opresiva realidad que agobiaba al autor. Él mismo crea los monstruos, los alimenta y rechaza. Interactúa con ellos tanto en el sueño como en la vigilia: habitan su alma.

La obra de Kafka ha sido encasillada por la crítica de diferentes maneras, los unos la ubican dentro del modernismo o el realismo mágico, los otros la asimilan al existencialismo. Su crítica permanente a la sociedad burocrática puede, tal vez, deberse a su breve militancia en las filas del anarquismo y su visión de las estructuras. Más allá de estas tendencias, esta representación en particular, al hacer hincapié en los mundos internos del autor y presentarse carente de parlamento, la acerca al surrealismo y el psicoanálisis.

Hay un muy buen trabajo corporal, condición necesaria si se tiene en cuenta que el peso de la historia recae en el movimiento y las expresiones del elenco. Pero otros elementos revisten similar importancia para sostenerla, los que hacen a la imagen: vestuario y maquillaje maravillosamente logrados coadyuvan en ese sentido. La cuarta pata de esa mesa es el sonido, reforzado por la interpretación en vivo del músico Ramiro Torreira.

Tal vez, algo a considerar es el pasaje de una a otra escena, que puede ser un elemento de distracción que rompa el clima de tensión logrado en la audiencia. El silencio absoluto en esos instantes no mejora esa situación pues se perciben los ruidos tras bambalinas.

Rubén Sacchi
http://desmenuzartemejor.blogspot.com/

viernes, 20 de agosto de 2010

Crítica Kafka... VI

Se sabe que el escritor Franz Kafka tenía códigos expresivos desconcertantes,a tal punto que incluso hoy se habla de situaciones "kafkianas." Cualquier lector de historias como "El paseo repentino", "Ante la ley", "Buitres" o bien "Una confusión cotidiana" ha de prepararse para un vuelo literario a una zona oscura, de raras dimensiones, de anhelosas angustias existenciales y no ponerse nervioso ante cambios repentinos e inesperados.
Si los textos del genial autor checo contienen más pliegues que la madre tierra, trabajarlos casi exclusivamente con los cuerpos tibios de jovenes actores en un espacio teatral independiente ha de ser un desafío enorme. Es lo que propone "Kafka," un espectáculo de Insomnio Asociación Teatral con la dirección de Federico Julián Stella en el espacio cultural Pata de Ganso.

La idea del director ha sido tomar los cuentos de Kafka como punto de partida para explorar espacios sensoriales con una estética que se acerca al expresionismo o de alguna manera al surrealismo. Entonces, la teatralidad del espectáculo nace en el misterio y en la angustia de los cuerpos, en la voz,en los gritos, en la respiración, en la banda sonora, en el juego de luces, en los aspectos que el teatro convencional considera como apoyos secondarios al texto.

Hay cierta falta de perfección en los movimientos escénicos, pues de este modo el espectador se incorpora más, de alguna manera lo hace reflexionar sobre instantes que podrían ser propios. A los efectos también de explorar otras dimensiones, a lo largo de la obra un audiovisual va y viene.
Si bien el expectáculo emplea códigos no convencionales y supone un alto nivel de experimentación, cabe elogiar la elocuencia del trabajo físico del elenco. Convendría leer los textos antes de ver el espectáculo.

Alfredo Hopkins
http://jaquematepress.blogia.com/

jueves, 19 de agosto de 2010

Crítica Kafka... V

Excelente modo de andar por una noche en el opresivo camino de Franz Kafka. Casi sin palabras, casi sin racionalización ni discurso podemos viajar por imágenes que nos reflejan elementos del autor de “El Proceso” y “La Metamorfosis”. Sórdido y seductor, realista y fantástico. Una experiencia en la cual parece asomarse vivo el corazón del artista. Una puesta jugada física y estéticamente. Jugada también la escenografía en la que ideas y esfuerzo superan las dificultades por la falta de soluciones mecánicas. La opción de los videos y la escenografía parecen pensadas para mostrar el universo de Kafka mirado desde la segunda mitad del siglo XX época esta última en la que su obra se leyó como la expresión de las angustias de la existencia.

Aunque Kafka evitaba cualquier posible salida a sus dilemas mentales y emocionales muchas veces lacerantes, esta obra plantea un momento de redención. El elenco asombra realizando con naturalidad movimientos, casi danzas que suponen un esfuerzo importante. Sin temor a la presencia de lo sórdido se zambullen en la interpretación creando momentos fascinantes. Si vamos a viajar por esos mundos aprovechemos esta versión condensada. Muy buenos además la puesta, las ideas, las luces, el sonido, la música, el video y las imágenes.

María Inés Senabre
http://espectaculosalamod.wordpress.com/

martes, 17 de agosto de 2010

Crítica Kafka... IV

Tiene un gran merito que logra atrapar desde lo visual aún sin una gran escenografía pudiendo entretener a quien no conozca incluso a Kafka. Algunos condimentos como la música en vivo y proyecciones de vídeo lo hacen salir del común. Combinando algunos cuentos del autor checo nos ayuda a ver desde la profundidad las situaciones cotidianas. Una muy buena dirección y actuaciones dan como resultado un espectáculo altamente recomendable. Nos quedamos con ganas de ver representaciones de algunos cuentos un poco mas complejos. El contacto visual intimida, pone incomodo al espectador, como también algún desnudo bien cuidado.

Nicolás Conti
http://www.showonline.com.ar/

domingo, 15 de agosto de 2010

Crítica de Kafka... en Radio Nacional

Les dejo el audio de la crítica que recibimos de la obra "Kafka, negro de tan preciso" en el programa del crítica teatral Jorge Dubatti en su programa Postales Argentinas, que sale por Radio Nacional AM 870.


sábado, 14 de agosto de 2010

Crítica Kafka... III


Kafka siempre es un autor para analizar pero además, si se realiza un buen trabajo, pueden sentarse en la platea y disfrutar del teatro de imágenes, de sensaciones, de sentidos y sentimientos. La propuesta de Federico Julián Stella produce en el lapso de una hora todos los estados incluso el de la emoción por el excelente trabajo corporal que realizan todos y en ese acto, tan sublime, transmiten mucho mas que millones de palabras. La música en vivo de Ramiro Torreira y la selección de imágenes que suman al lenguaje de la historia, invita todo el tiempo a deleitar al espectador con situaciones narradas con estilo, buen criterio y creatividad. Las actuaciones sostenidas en un sublime sentido corporal de Celina Carbajal, Marcos De las Carreras, Lorena Gaivironsky, Julieta Rozenblum, redoblan la apuesta y vuelven a ese echo teatral un momento original y encantador. Los textos del extraordinario Franz Kafka mostrados de este modo, son agradables y llegan hasta lo mas profundo, provocando a la emoción. ¡Para ver!

Meche Martínez
http://vidayamorporlapalabra.blog.arnet.com.ar/

jueves, 12 de agosto de 2010

Crítica Kafka... II

Por Sebastián Barrera - Miércoles 04 de Agosto de 2010
http://www.elbondi.com/teatro/2010-07-30.4649/teatro.php?cobertura=4649

Cuentos de Praga

Cuatro historias de Kafka según cuatro actores y un gran trabajo audio-visual.

Ver una obra de teatro basada en cuentos de Kafka ya supone cierta incertidumbre que sólo se quiebra al terminarse. Sus cuentos se pasean por lo desconocido, por las vueltas de tuerca, por la búsqueda y por los sueños. “Kafka, negro de tan preciso”, es un viaje personal que corrompe cualquier lógica previsible.

El verdadero trabajo de Julián Stella, director y guionista, fue realizar una obra que no dependa de las palabras para expresar las ideas de Franz Kafka. Los cuatro actores no hablan, interactúan con su cuerpo, con la ayuda de sombras y del excelente material audio-visual que acompañó la hora y minutos de una obra impactante desde el comienzo.

“El paseo repentino”, “Ante la ley”, “Buitres” y “Una confusión cotidiana” son los cuatros cuentos que el director eligió para contar una gran historia de personas que se buscan constantemente. Recomendamos googlear y leerlos, que son cortos e interesantes.

Con la ayuda de sombras, luces y un proyector con imágenes, los cuatro actores se pasean por el escenario recreando cuatro cuentos de un genial autor que no deja de ser contemporáneo, sin importar cuántos años hayan pasado.

martes, 10 de agosto de 2010

Críticas Kafka...


Un par de criticas cortas sobre la obra "Kafka, negro de tran preciso"

“Es arriesgado abordar a un escritor prescindiendo de la palabra, pero en la puesta resulta acertada la elección.” Mariana Fracassi Lazzarini
http://www.laculturanacional.com.ar

“Es una propuesta valiosa que supera lo literario para dar el paso hacia lo teatral.” Ezequiel Lozano
Docente "Análisis y crítica del hecho teatral" UBA

lunes, 9 de agosto de 2010

La noche que reemplacé a mi ex profesor

Viernes 00.40. El reloj marcaba el final de una nueva función de Kafka. De regreso, en el camarín, me sacaba el traje del personaje, salía del mundo kafkiano, me cambiaba para saludar a la gente que vino a apoyar. En el celular tenia 3 mensajes.... Uno era de mi viejo que me banca incondicionalmente función a función y con el cual tenemos la cábala de mandarnos mensajes de aliento minutos antes de cada función. El otro mensaje era de mi amigo X que avisaba que no llegaría a ver la obra. El último era de Pablo Chao, mi ex profesor de teatro durante dos años y uno de los principales responsables de que haya decidido ser actor. Su mensaje decía: "Hola Marcos, ¿cómo estás? Mariano se enfermó y me preguntó Christián (el director) si estas para salir a la cancha". No dudé un segundo en dar el sí. La obra es "El Monstruo tan temido" en la cual ya hace unos tres o cuatro meses que vengo hacieno la asistecia de dirección. Si bien no pude estar desde el comienzo, es decir, durante el proceso de ensayos y creación de la obra, en cada función aprendo mucho. Además era una gran oportunidad para mostrarme y codearme con estos grandes actores. Es un verdadero placer formar parte de este grupo humano que no sólo me hace sentir parte del mismo, sino que me brinda plena confianza. Tal es así que finalmente me llegó la oportunidad de mostrarme como actor. Mariano, uno de los actores, estaba enfermo, por lo que Christián decidió que Pablo interprete el papel de Mariano y que yo personifique el de mi ex profesor Pablo. En pocas horas del sábado tuve que aprednerme el papel y la letra. Una mezcla de nervios, ansiedad e incluso seguridad corría por mi cabeza desde que me enteré de la noticia.

El sábado a la mañana me levanté temprano. Fui a un ensayo que estoy haciendo con cuatro compañeros del curso de Alejandro Catalán para ver si armamos una presentación. Almorzamos juntos y me puse a repasar la letra y movimientos de "Huerquen" el simpático personaje que tendría que interpretar esa misma noche en El Monstruo. Si bien lo conocía bastante ya que sábado a sábado lo disfruto desde la cabina de sonido y luces, el darle carne a ese personaje era un desafío muy especial para mí. Primero y principal porque hacer el personaje de un ex profesor no es nada fácil. No sé a cuantos actores les habrá sucedido una cosa así. Segundo, porque compartir el escenario con este tipo de actores fue una sensación muy emocionante.


Durante la función me sentí muy cómodo y las cosas salieron como esperaba. Por suerte, no desentoné en la obra. Esa era una de mis principales preocupaciones. La experiencia de actuar en el "Teatro del Abasto", dónde vi infinidades de obras y de grandes actores, fue única. Desde el momento en que pisé ese escenario sentí la magia de estar viviendo ese aquí y ahora, de convertirme en Huerquen, el simpático trobador que nació fruto de la relación entre su madre y un indio de la zona y que tiene el don de ver el mal de ojo, de ver las cosas antes de que sucedan.

Fue un fin de semana a puro teatro viviendo como un verdadero actor. Estoy seguro de haber dado un paso enorme.

domingo, 8 de agosto de 2010

Spot de Radio

Hicimos un spot presentando la obra "Kafka, negro de tan preciso" para una radio. Se los dejo para que lo escuchen.

miércoles, 4 de agosto de 2010

Me rechazaron

Primer casting en el que me va mal. Este blog arrancó con el pie izquierdo. No me eligieron, no quedé. Primer rebote y me acuerdo de las pibas que me mandaron al descenso. Algo sé de rebotes. Aprender de los traspiés ayuda a crecer. Aprender del proceso y no del restultado, eso es lo que me sirve. Esta situación va a fortalecerme para el futuro, para las próximas pruebas.

Y el futuro llega al toque. Este viernes tengo función en "Kafka, negro de tan preciso". Por suerte nos está yendo muy bien. El teatro independiente es un camino jodido. Los reveses sobran y los triunfos escasean, pero bien que valen la pena. Muchas veces me pregunto si es correcto seguir en este barco que pierde el rumbo fácilmente, con colegas que se frustran y se bajan de los proyectos, esperando que llegue algún subsidio o inventando rifas, fiestas, varietes para bancar los gastos. Todo para mantener en escena todo el laburo que realizamos. Es desgastante.

Si. Todo parece negativo y que estoy a las puteadas por el casting; pero no es así. El mal humor desaparece cuando tengo función. La adrenalina que vivo antes de salir al escenario a enfrentar a ese mounstro, sin más armas que mi cuerpo, es inexplicable. En ese momento recuerdo cada uno de los momentos que viví para poder estar ahí, frente al público: cada fin de semana sacrificado, horas de sueño, de estar con mis amigos y seres queridos, etc. Todos esos recuerdos desaparecen cuando percibo la magia de la actuación. Antestesia para los dolores físicos, angustias, enojos y demás sentimientos.

Por último, llega el aplauso final. El alimento de todo actor. El reconocimiento de que las cosas valen la pena.

sábado, 31 de julio de 2010

Día de Casting

Hace unos días me llamaron para hacer un casting el viernes: buena plata, en mano, rápido... nada mal. No fueron muchas las veces que encaré este tipo de situaciones. Tal vez, porque sólo hace seis años que me volqué al teatro. Tal vez porque hace poco tiempo que soy capaz de enfrentar este tipo de momentos. Me siento como si estuviera aguardando mi turno en una sala de espera de hospital. Sin embargo estoy confiado porque tuve la suerte de quedar en todas las pruebas que hice.

Apenas llegué a la prueba me senté en un viejo tablón de madera. Parecía un jugador de fútbol en el banco de suplentes esperando su momento de gloria. Mi número era el 95. El tiempo pasaba y quedaba menos gente. En realidad debería decir contrincantes, adversarios, porque eso es lo que son. Competencia que, sin ningún escrúpulo, desearía que los otros aspirantes rajen con el culo entre las manos. Conmigo se equivocaron. "Me quedo a pelearla y voy a dejar todo para pasarlos por arriba. Ninguno es más que yo en este momento", pensaba.

Sus rostros destilaban impaciencia. Algunos pasaban una y otra vez frente al espejo para peinarse, arreglarse la ropa. Otros, nerviosos, miraban el techo mientras movían histéricamente sus piernas.

Éramos entre quince o veinte personas esperando. No nos parecíamos en lo mas mínimo. Era como una especie de Torre de Babel. Oíamos risas, gritos y llantos que provenían de los cuartos en los que se realizaba el casting.

Finalmente llegó mi turno. Me explicaron más o menos de qué iba la cosa. Después de las clásicas preguntas de rutina, salí a defenderme con lo que tenía. La experiencia fue muy positiva. No sé si habré quedado, pero me enteraré pronto ya que la filmación es el domingo. Mientras tanto, regreso a la sala de espera.

viernes, 30 de julio de 2010

Este soy yo

Me llamo Marcos y tengo 26 años. Soy el primogénito de una familia de clase media alta. Me formé en un colegio católico tradicional, de esos en los que usás uniforme, el pelo corto, ni un gramo de barba y, los primeros viernes de cada mes, faltás a clase para ir a misa. Luego ingresé a la universidad y conseguí el título de abogado, como mi padre y como mi abuelo. Si me casaba y tenía hijos me transformaba en el hijo modelo... Pero descubrí que mi profesión era la actuación.

Hace dos meses renuncié a uno de los estudios de abogados más prestigiosos del país, corté con mi novia después de dos años de relación y me alejé de muchos amigos porque me sumergí en el mundo teatral. Cuando decidí atravesar esas barreras me volví más humano.